
Era imposible que no hiciera un post de esto aquí en el blog. Si hay algo que debo decir es que fue Jane Austen la encargada de enamorarme de los libros clásicos.
Y es que gracias a ella, decidí adentrarme en ese mundo desconocido e indagar en otros temas que hasta ese momento no me habían llamado demasiado la atención.
¿Quién no ha leído a Jane Austen?
Creo que todos conocemos sus obras, si tú no la has leído no sé qué haces pero necesitas ponerte con eso ya.
Hablo de esta autora porque me encanta, y antes de que digan nada o empiecen a llover quejas de que todos hablan solo de Austen y que existen más clásicos, me permito recomendarte que eches un vistazo a este post o este en el que he hablado de otras autoras y clásicos que seguro podría gustarte.
Ahora me pongo seria, porque no podía dejar de hablar de los personajes femeninos que Jane nos regala en sus obras. Y esto lo quiero resaltar, es importante tener en cuenta la época en la que la autora escribió sus obras, y el papel que representaba la mujer en aquel entonces.
Sí, me permito decir que fue una mujer transgresora y que nos regaló personajes feministas que lucharon por tener un lugar en el mundo, que no se conformaron con lo que el destino tenía preparado para ellas.
Y muchos me dirán que la mayoría de estos personajes terminan casadas, o con romances idílicos.
Y yo voy a rebatir este punto. Como bien he dicho es necesario tomar en cuenta el contexto de la época, para aquel momento ser una mujer soltera que pasaba los veintitantos años significaba que eras una solterona sin futuro. Además, si bien Jane decidió otorgar un final feliz a sus heroínas, ella nunca se casó.
Y antes de empezar voy a empezar hablando de Jane, de esas bases que asentaron su pensamiento y la llevaron a ser la mujer que fue.
Así que ponte cómodo y disfruta de esta lectura.
Jane Austen, la autora
Fue una mujer que desde los veinte años reflexionaba sobre los vicios y las virtudes de la sociedad en la que vivía. Poseía un ojo crítico para analizar el comportamiento humano, y es uno de los rasgos que caracterizan su obra.
Nos presenta historias con personajes y situaciones reales, abre una ventana a la sociedad inglesa y no duda en plasmar la ironía y el cinismo en sus letras.
Sus obras gozan de importancia, uno de los aspectos más valorados es la diversidad de matices que nos entrega con cada uno de sus personajes.
El estilo de la autora se consideraba innovador en su época y aunque hablamos de novela romántica (no me gusta catalogarla dentro de este género), gozó de gran popular en su momento, aunque no fue hasta el siglo XX cuando Jane Austen se convirtió en una verdadera celebridad de la literatura.
Me gusta creer que sus novelas están cargadas de tintes costumbristas y que logran reflejar el pensamiento de una época. La preocupación de la mujer ante la perspectiva de no conseguir un buen matrimonio, o la educación que recibían.
Ahora sigamos con esas heroínas que Jane Austen nos regaló con sus historias.
Elinor Dashwood y Marianne Dashwood
Estas hermanas son las protagonistas de Sentido y sensibilidad. La historia nos presenta un contraste muy interesante entre las personalidades de las hermanas, no pueden ser más distintas entre sí.
La trama de la novela gira en torno al contraste entre ellas. Es decir, el buen sentido de Elinor, y las emociones y sentimientos de Marianne. Sus temperamentos tan distintos son los que dan forma a la relación entre ambas y el resto de los personajes. La primera es más comedida, reflexiva y dispuesta a acatar las normas, mientras que Marianne es muy impulsiva y se deja guiar por sus sentimientos.
El tratamiento que Jane Austen logra dar a esta relación es complejo y evoluciona a lo largo de la trama.
Elinor es hilo conductor de toda la novela. Es descrita como una mujer con gran sentido del juicio, actúa como la consejera de su madre y en ocasiones demuestra tener más sentido común que la misma. Elinor no se mantiene como un personaje plano, tiene una evolución constante a lo largo de la historia, y no deja de ser fiel a los valores que la caracterizan desde un principio.
Marianne por su parte posee una sensibilidad excesiva, la caracteriza la espontaneidad y el idealismo romántico. Es la contra parte de su hermana. Sin embargo también vale destacar que sufre una evolución a lo largo de la trama, es un personaje con matices que logra aprender de las cosas que le suceden.
Elizabeth Bennet
Es la protagonista de la obra más popular de la autora, Orgullo y prejuicio. Es la segunda hija de los señores Bennet, la menos querida por la madre, pero la predilecta del padre gracias a su intelecto.
Lizzy, como todos la llaman, es una chica despierta de esas que no abundan. Es uno de los mejores personajes femeninos de Jane Austen, y quien mejor asume la posibilidad de la amenaza de la soltería. Está decidida a casarse por amor y no por conveniencia económica.
Es valiente y no duda en exponer sus pensamientos ante los demás. No se deja llevar fácilmente, y aunque se le presentan oportunidades que tal vez cualquier otra chica en su condición no hubiese dudado en aceptar, Lizzy tiene muy en claro que es lo que quiere, no se muestra dispuesta a ceder por complacer a los demás.
Este es uno de esos personajes que permanecen sin lugar a dudas en la mente del lector. Y es que Jane nos regala una protagonista capaz de tomar sus propias decisiones, reflexiva y muy natural.
“Cuánto más veo cómo es el mundo, más me desagrada; y todos los días confirmo mi creencia en la incoherencia de los seres humanos, y en la poca confianza que se puede depositar en las apariencias del mérito o de la inteligencia.”
Emma
No podía dejar por fuera a la caprichosa y encantadora Emma. Y si hay algo que debo destacar de ella, es que probablemente es la única protagonista de Jane Austen que no sufre una mala situación económica.
Y es que Emma es hermosa, lista y muy rica, pero también una chica bastante mimada que cree poder cambiar la vida de los demás haciendo de cupido.
Emma es una mujer independiente que nunca ha mostrado deseos de casarse. Al contrario, ella considera que lleva una vida perfecta, y juega a ser casamentera entre sus conocidos esperando que otros sean tan felices como ella.
Si hay algo que me gusta de Emma, probablemente sea esa seguridad y poca atención que presta a los pretendientes. Está más pendiente de la vida amorosa de los demás que la suya.
Esta protagonista mantiene una actitud frívola y en ocasiones egoísta. Es manipuladora y no tiene cuidado al inmiscuirse en la vida de los demás.
Algo que me gusta mucho es la evolución del personaje. Emma a lo largo de la trama se verá en la necesidad de madurar y será consciente de sus errores, también de la falta de tacto que tuvo con muchos de sus conocidos.
Estas son sin duda algunas protagonistas maravillosas que nos ha dejado la pluma de Jane Austen.
Sus obras se han convertido en una crítica a las convenciones sociales de la época, al pensamiento femenino y la necesidad de un buen matrimonio para asegurar el futuro de la mujer. También habla de las diferencias enormes que existen entre las clases sociales.
Me ha encantado tu post!! Yo he leído a Jane Austen y opino igual que tú. Creo personajes femeninos muy fuertes, para la época en la que vivió. Creo que Lizzy fue algo así como una pionera, un personaje al que admirar, la guerrera de su época. Yo no me canso de Orgullo y prejuicio. Me gustan todas las obras de Jane Austen, pero orgullo y prejuicio es otro nivel.
Un beso guapa! Me encanta leerte 🙂
¡Hola!
Pues no he leído a Jane Austen porque no he tenido ocasión pero eso no significa que no haya querido!!! Así que no me tires piedras, ¡porfa! jajaja
Sí he visto la película de Orgullo y Prejuicio, que me encantó, y La joven Jane Austen (creo que se llama así) que cuenta un poco la vida de la autora, y también me encantó. Aunque no he leído sus obras sí he leído suficiente sobre ellas como para estar completamente de acuerdo contigo en que es una transgresora.
¡Besitos sonámbulos! ★?
Me ha ENCANTADO este post, porque me encanta Jane Austen!
Estoy muy muy de acuerdo con todo lo que dices; definitivamente es una de las cosas que más me gusta de la autora. Teniendo en cuenta la sociedad de la época escribir lo que escribía requiere mucho valor; para mi era casi una visionaria. A pesar de la sociedad tan estricta que la rodeaba supo ver mucho más allá. Ojalá más mujeres como ella.
Sin duda mi personaje favorito es Lizzy (porque Orgullo y Prejuicio también es mi libro favorito). Todavía no he leído todas sus obras pero en ello estoy. Hasta la fecha la única que no me gustó es «Persuasión», y más que nada por que no vi esa personalidad fuerte tan característica de todas sus protagonistas femeninas…
Un Besote = D
Bueno, mi novela preferida es Persuasión, y de ahí que de los personajes femeninos de Jane Austen es justamente Anne Elliot. Ahora, si se trata de pesonajes femeninos, en realidad hay mucho para conversar, porque no solo de las nombradas, Lizzy y Jane Bennet, Elinor Dashwood, Marianne Dashwood y Emma Woodhouse tienen algo que decir. Hay gente que no entiende completamente lo que las mujeres de las novelas de Austen hacen o dejan de hacer porque no ven la situación en su contexto. Como dices, para una mujer, en el nivel social de los personajes de estas novelas, que pasaba sus veinticinco todavía soltera (Anne Elliot pasa de los veintisiete), la situación podía tornarse dramática, sobre todo si la situación económica era problemática. De ahí qué, aunque a veces la Sra. Bennet puede parecer exasperante, se debe comprender su angustia al pensar en la situación de sus hijas si se quedasen solteras. También está la cuestión de la edad, diferente a la actual, cuando vemos como Lydia Bennet se casa a los quince años, cosa que no causa el menor asombro (el cómo se casó es otro asunto). Recuerdo que Catherine Morland tenía diecisiete. Tenemos el caso de Charlotte Lucas, de quienes se dice: «Catherine y Lydia estaban muy lejos de envidiar a la señorita Lucas, pues Collins no era más que un clérigo», sí, claro que el señor Collins no tenía ni el dinero de Darcy ni el encanto de Wickham, pero a Charlotte ya no le quedaban posibilidades, y al final, aunque Collins no era marido para la orgullosa Lizzy, la verdad es que con Charlotte lograron conformar un matrimonio sólido. Otro personaje femenino interesante es Harriet Smith, de la novela Emma, joven que por ser «hija natural de alguien» es especialmente vulnerable, pero que como a pesar de no ser inteligente tiene un caracter dulce, merecía ser feliz con su granjero, el Sr. Martin.