
¿Existe el bloqueo de escritor? ¿No me hablan las páginas?
He tenido unos días un tanto complicados en los que me ha costado como nunca recuperar la concentración. No sé si debe al
“bloqueo de escritor” o simplemente mi concentración está de viaje y hace un rato que no viene por aquí.
Como ya he dicho muchas veces, hubo un tiempo en el que me obligaba a escribir. Pero justo estos días decidí hacer lo contrario. Tengo una semana exacta en la que escribo lo que me apetezca cuando me apetezca.
Así es. Estuve el domingo en la playa, y si algo acudía a mi cabeza pues apuntaba esas frases sueltas, he decidido enfrentar el bloqueo de escritor de esta manera.
Muchas veces he compartido mi experiencia comentándoles la frustración que sentía al estar tantas horas en el trabajo, y dejando tan pocas para desarrollar mis ideas creativas.
Creo que el bloqueo de escritor puede surgir por muchas causas. Ya sea presión, agotamiento mental, dudas… En mi caso he lidiado con un mal clima laboral.
Trabajar en una pequeña oficina, rodeada de un par de personas con actitud déspota, afectó notablemente mi escritura. Además de lidiar con días eternos y la negatividad de otras personas, me tocaba “enfrentar” a estos “lideres o jefes” con sus comentarios e ideales (si no piensas como ellos eres el enemigo) mi cabeza estaba agotada, y de pronto me quedé sin ideas.
Sentí que mis relatos no lograban tener el cierre que yo quería, o que no sentía la expectativa conforme avanzaba la historia.
Desde luego no es la primera vez que me enfrento a este temido mal.
Cuando escribí mi primer libro (era muy joven aún) enfrenté un bloqueo que me dejó sin ideas.
Si bien sabía cómo quería que terminara la historia, no encontraba esos puntos para unirla. Y a lo largo de estos años escribiendo, he aprendido algunas cosas que te ayudan a dominar el bloqueo de escritor y superarlo.
Actualmente estoy dedicando unas 10 horas diarias a escribir y al blog. Tal vez esto tenga que ver con el incremento de visitas que experimentamos esta última semana.
El primer paso es ¡potenciar tu creatividad!
Es un poco general lo sé, pero este tópico lo abarca todo.
Sal a la calle a correr, ver gente… Escribimos historias, y cuando me quedo en blanco, salgo de mi casa a buscarlas…
Muchas veces enfrentamos el bloqueo de escritor porque nos negamos a salir de nuestra zona de confort. Te invito a que busques nuevas lecturas, te embarques en aventuras que no son del todo tu estilo. Es una de las técnicas que mejor me resultan.
El cambiar de género literario resulta muy enriquecedor para mí.
Soy de fantasía y me apasionan los clásicos. ¿Por qué no probar cosas diferentes? Expande tus límites y abre una ventana de posibilidades.
Mi experiencia: cuando empecé a escribir Torre de mar creía saber todo lo que iba a ocurrir. Empecé a redactar y dejé la organización como último punto. ¿Qué ocurrió? Con 134 páginas bien hechas, me enfrenté a un muro de contención en el que las ideas ya no acudían a mi cabeza.
No había espada mágica que me ayudará a enfrentar la situación.
Me presioné incansablemente durante noches eternas para buscar la línea argumental con la que seguiría. Pero, el muro se mantenía allí, sólido en infranqueable.
Poco a poco las ideas fueron surgiendo solas. Y cuando me alejé de las páginas y decidí despejar mi cabeza, pude continuar con la línea que venía siguiendo. Aún mejor, conseguí nuevas vueltas a la historia, situaciones que no me había planteado y que podían aportar mucho al libro.
Escribe sobre otras cosas
Cambia la pluma y dedícate a escribir cosas totalmente diferentes. Deja que tu cabeza despeje, que pruebe nuevas líneas, que experimente otros sabores.
¿Sabes qué me resulta útil? Tomar papel y lápiz.
Sí, puede sonar un poco absurdo, pero a día de hoy, estoy totalmente acostumbrada a escribir en el ordenador. Cuando tomó papel y lápiz, mi cabeza suele ir un poco más rápido y mis manos se esfuerzan por seguir el hilo de esta. Me resulta ideal el sentir el trazo de mis manos, muchas veces, sin nada que contar, y otras tantas, van llegando nuevas historias o tramas que me ayudan a dar una visión distinta.
Sal al cine o al teatro
Yo hago esto periódicamente y me resulta una actividad liberadora.
El cine y el teatro van de la mano con la literatura. Quien asiste a una función solo quiere degustar una buena historia, y quien compra un libro, también.
Déjate contagiar por la creatividad de otros. Es una oportunidad para disfrutar de nuevos mundos.
Cambia de lugar
Sí, si estás acostumbrado a escribir en tu escritorio y no consigues enfrentar el bloqueo de escritor, es momento de salir a la calle.
Una cafetería, el parque, la plaza…
Existen tantos lugares que nos ayudan a potenciar nuestro lado creativo que podría hacer una lista infinita.
Uno de mis lugares favoritos son las bibliotecas.
En Madrid tengo la suerte de tener muchas a mi disposición, me encantan. Además del silencio, tengo a la mano una infinidad de tomos de los que puedo hacer uso si lo requiero.
Una de mis favoritas está en el Retiro, la biblioteca pública Eugenio Trías. Tiene espacios para la creación, por lo que te encontrarás con muchos recursos además de unas vistas preciosas.
La naturaleza también suele ser uno de mis lugares para lograr cambiar de aires. La montaña, playa… no sé, cuando necesito un nuevo respiro me voy al parque (es lo que tengo más cerca) y suelo encontrarme con ese final tan buscado para mi último relato.
Muchas veces pido opiniones. No soy de mostrar mis escritos a otras personas, y mucho menos si no están terminados. Pero puedo indagar un poco con mis conocidos a ver qué les parece la historia (suelo resumir mucho la trama) y espero a ver sus reacciones, eso me da indicios sobre los caminos que puedo seguir.
Estos trucos me funcionan muy bien para enfrentar el temido bloqueo de escritor. Si bien se pueden tener días buenos o malos con la escritura, probar cambiar aires y salir a buscar inspiración siempre resulta provechoso.
Y tú, ¿A qué técnica recurres en estos casos?
Muy bueno realmente cuando pasa estas cosas lo mejor que hago es escuchar música y recordar lo tanto que me apasiona, una vez que estoy ahi, comienzo a llenar mi mente de las cosas que tanto amo de lo que deseo lograr e increíblemente eso cambia las cosas. Tener una disciplina y planificación de nuestro contenido pueden ayudarnos a no dejar nuestro blog en blanco por mucho tiempo
Muchas gracias por compartir tu experiencia Luisa, tenemos que buscar la manera de atacar el bloqueo y seguir siendo creativos. Saludos
Coincido con Luisa, la música no suele fallar. Tampoco me suele fallar el mate. Ustedes no conocen el mate -me parece-, pero el mate es una infusión que se hace con hojas de yerba mate y que se consume gracias a una bombilla puesta sobre un pequeño recipiente que contiene le yerba mate, caliente, o sea, se la moja con agua caliente. Para cualquier desconocido podría tratarse de una droga, pero no lo es, o sí, porque es muy adictiva (pero sana). En definitiva, la música y el mate nunca (o casi nunca) me decepcionan.
Buen post.
Muy cierto! No he probado el mate pero voy a investigar a ver si lo consigo. Un abrazo